14 de febrero de 2013

En algún lugar del sur, 14 de febrero de 2013

Hola Silvia,

Hay algunas cosas que me sacan de quicio como por ejemplo que me entren ganas de escribirte cuando por fin he conseguido calentar la funda nórdica.
Que el ordenador tarde 800 horas en arrancar mientras siento como las musas se escapan por la rendija de la ventana junto al humo del cigarro.
Frases del tipo "es normal, son niños". No! cojones! no porque sean niños se les tiene que permitir todo!
¿Sabes de lo que tengo ganas? de que la frase "no te preocupes, todo se arreglará" se convierta en "deja de preocuparte, ya estoy yo aquí y lo voy a solucionar". No cuesta tanto decirlo, y mucho menos hacerlo, tan sólo se necesita amor, respeto y ganas de hacer feliz a la otra persona porque realmente crees que se lo merece.

Como te conté, hace más de un año que conocí a alguien y cuando me di cuenta de que él era mi príncipe azul y de que tan sólo había una manera de estar juntos, no lo dudé, hice las maletas y me fui. Fue mi "no te preocupes cariño, ya estoy yo aquí y lo voy a solucionar". Y lo hice.
Durante el verano viví en un auténtico paraíso! pero el verano terminó y Dios me echó de él en cueros y con tan sólo una jodida manzana para alimentarme. Y entonces me comió la realidad.
¿Que cuál es la realidad? pues como en todo cuento, una bruja que echa una maldición sobre el príncipe o la princesa, en este caso, sobre el príncipe aunque le ha salpicado a la princesa.
La maldición fue clara: tan sólo serás hombre durante una semana, a la siguiente serás tan sólo padre. Y con esa maldición vivo desde entonces.
Es curioso porque sé que la maldición tan sólo durará una semana, pero no consigo acostumbrarme.
En mi caso es peor, mi maldición fue: parirás con dolores (jódete y sino haber puesto protección, que ya te lo advertí) y serás madre 24 horas al día 365 días al año. Hala! para que te jodas Paca! ahora duermo en el suelo!
Vale, no me gustan los niños, todo el mundo lo sabe, y por eso quizá no tengo paciencia, por eso quizá soy más exigente y por eso quizá echo de menos ser tan sólo mujer. No! espera! lo de ser mujer debería prevalecer sobre lo de ser madre, no? ninguno de los dos papeles te abandonará durante el resto de tu vida, pero llevo más años siendo mujer que madre.

El caso es que durante la semana que la maldición cae sobre nosotros, casi no podemos vernos. Intentamos robar tiempo a nuestras obligaciones viéndonos a escondidas en comidas clandestinas o alguna que otra cena, siempre intentando que la bruja no se dé cuenta porque sino manda su rayo porculero y uno de los niños nos jode.
Es una mierda. A mi nadie me avisó de que me vendría a vivir con medio hombre. Yo llevo 8 años siendo madre y mi marido nunca se quejó de que dejara de ser mujer. Sí, ya sé que soy muy exigente, ya lo hemos dejado claro antes, pero no sé por qué tengo que conformarme con menos de lo que yo doy.
Imagino que la angustia de que la maldición tan sólo dure una semana, hace que todo se viva con más intensidad pero coño! yo me vine aquí buscando tranquilidad y serenidad en mi vida el 100% del tiempo, no 50% paz y 50% maldición. Y mi pregunta es:¿cómo lo hacen los padres que son matrimonio y padres el 100% del tiempo?
Yo lo veo así, la vida debe ser como un gran cajón con cajones pequeñitos que representarían tu vida, el tiempo que tienes para hacer determinadas cosas, como el anuncio ese tan idiota de la cocacola light, es decir, un cajoncito para el trabajo, un cajoncito para dormir, un cajoncito para comer, otro cajoncito para cagar, y a partir de ahí, organizar el resto de las cosas que hay que hacer porque estamos de acuerdo que sin comer, dormir, trabajar o incluso cagar, no podemos subsistir, el resto es...eso, el resto.
Un cajoncito para encargarte de la compra, de las comidas, del ocio, del tiempo con tus hijos, del tiempo con tus amigos, del tiempo para tu pareja y del tiempo para ti, a solas. ¿Qué ocurre cuando mezclas el contenido de esos cajoncitos? pues que algo está mal, algo funciona como el culo! porque de la misma forma que no puedes hacer la compra mientras cagas (a no ser que lo hagas por internet), no debes mezclar el tiempo de estar a solas con la compañía, o el tiempo de estar con tu pareja, con los hijos. De vez en cuando se puede mezclar, pero debes asegurarte de que después reorganizas todo y vuelves a meter cada cosa en su cajón porque sino llegará un momento en que vayas a encontrar tiempo para estar con tu pareja y no lo encuentres y entonces sobreviene el caos, porque ya nada está organizado, ya nada está en su sitio.

Ayer estuve en la mediadora. Mi chochete va muchísimo mejor, por cierto, se llama Almudena, pero aún le cuesta coger algunas rutinas y no entiendo porqué! es muy fácil, cojones:
Desayunas, te lavas, te vistes, te calzas, te peinas y al cole. Todos los días la misma historia desde que tenía un puto año y aún no lo ha asimilado.
Descubrimos que si durante el desayuno ve los dibujos, el tiempo vuela, yo me enfado, grito y al final llegamos tarde al cole. ERROR!!!!! hemos juntado dos putos cajoncitos, el de las rutinas y el del ocio. Incompatibles!. Y claro, cuando por la tarde le pido a mi chochete que mantenga las rutinas, ella tiene los cajones mezclados y le cuesta mucho volver a ordenarlos.
Nos impuso la mediadora que organizáramos los cajones y que si estábamos en el desayuno, no había tele. FUNCIONÓ! y al tercer día, aflojé la manta y la dejé volver a juntar los cajoncitos, es decir, la dejé volver a ver la tele mientras desayunaba. ERROR!!!!!
Es jodidamente cierto: las rutinas hay que mantenerlas. Siempre. Sin pensar en que la maldición tan sólo dura una semana, porque de una forma u otra, llegará otra semana. Los puñeteros cajoncitos no deben mezclarse porque sino, ya sabes lo que te va a pasar, luego no vengas a llorarme.

Un beso, te recuerdo
Maripili.

11 comentarios:

  1. Joder tía, menudo estrés me ha entrado. Me gustaría decirte que, bueno, desde mi perspectiva de "no madre" (o sea, otra perspectiva diferente a la tuya) creo que es muy doloroso exigir lo mismo que damos porque las personas somos diferentes y eso es imposible. Estaría bien detectar qué recibimos que no damos. Estaría bien bajar el nivel de exigencia y expectativas, a mí por lo menos me hace sufrir. Y estaría bien contemplar los conceptos de resignación y aceptación, sin las connotaciones peyorativas que tienen. Así nos enfrentamos mejor a lo que viene. Está claro que nadie cuenta con que le venga la maldición de una bruja, eso es un hecho :D Y está claro que estos "consejos" los digo en voz alta porque no los estoy poniendo en práctica, pero quería compartirlos igualmente, salvando las distancias y diferencias.
    Lo de los cajoncitos aún no lo tengo claro. Si bien me parece útil, me desquicia un poco no controlar todo. Tengo que cargarme el gen de controladora o me matará...
    Un beso.

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    1. Siempre he querido decir esta frase de Destino jijiji:
      A ver, Rune, te lo voy a explicar de forma muy sencillita y tú, que eres muy lista, seguro que lo entiendes.
      Hijoputa! qué ácido es! jajajajajajajajaja
      Ahora en serio. Lo primero que debes tener en cuenta cuando lees mis cartas (so cotilla) es que realmente son cartas a una amiga, es decir, es exactamente lo que le escribiría a Silvia. No pienso que es un blog, es una carta privada. Por ello, escribo un poco sin sentido, mezclando sentimientos presentes con pasados, hablando de parejas o de hijos, todo rejuntao.

      Y ahora, por partes.
      No has entendido lo de los cajones????? pues fácil! Recuerdo que cuando no tenía a mi hija la vida era absolutamente distinta, mis preferencias eran distintas y no era ni tan exigente ni tan perfeccionista ni tan sargento, pero cuando otra vida depende de ti, las cosas cambian.
      Cuando tan sólo dependes de ti o sólo tienes que encargarte de ti mismo las cosas son más fáciles, si dejas (por ejemplo) las bragas tiradas en el suelo no pasa nada porque se pueden tirar ahí 15 días que nadie te dirá nada pero cuando un moco de 8 años te mira y te imita y te coge de modelo, tienes que ser Doña perfecta porque no puedes exigirle que recoja las bragas sucias si tú no lo haces.
      Por otro lado, los niños son TODOS unos tiranos. Durante los primeros años de vida lo dejas todo por ellos y luego te cuesta un cojón reeducarlos. Ellos creen que se merecen tu atención el 100% por derecho pero es un error porque puedes volverles caprichosos y dependientes.
      Cuando tienes hijos, Rune, todas tus acciones tienen consecuencias, TODAS! y debes mirar con lupa cada cosa porque incluso el hecho de que se te escape un erupto en la comida puede llegar a ser un error si estás educando a tu hijo el protocolo en la mesa. Los niños no entienden las excepciones hasta muy mayores y cuando en casa les dejas ser tiranos, en la calle también lo serán y eso es malo para ellos porque al final terminan quedándose solos.

      Si hablamos de la exigencia entre la pareja, la cosa cambia. Efectivamente no puedes pedir que te quieran como tú quieres, eso está claro, pero sí puedes pedir respeto. El respeto no se basa sólamente en la falta de insulto en el gracias y por favor, el respeto va más allá como por ejemplo no ensuciar lo que tú limpias o intentar ser más ordenado cuando es la otra persona la que organiza.

      Y ya el remate: juntar pareja con niños. Un cóctel mortal de necesidad! porque debes lidiar con muchos frentes abiertos, es como estar haciendo malabares contínuamente mientras intentas llevar una vida "normal". Si se te cae una pelota debes recogerla porque sino el equilibrio se pierde y si por suerte tienes partenaire y te ayuda con los equilibrios, lo mínimo es agradecérselo y hacer su trabajo más fácil, sobretodo cuando estás viendo que lo hace bien y que desde que tienes partenaire todo es mucho más fácil.

      Mejor? de todas formas ten en cuenta que en este blog será siempre "mi me conmigo" es decir, si alguien tiene algo que decir en contra, que se escriba su propio blog, no? jajajajaja siempre encontrarás cómo me siento yo, no como se sientes los demás, eso serán los demás los que lo tengan que decir, como tú en este caso.
      Y tranquila, el gen controlador te invade justo cuando lo necesitas.

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  2. Bueno, yo esta entrada no la he pillado, la verdad. No entiendo nada y no quiero ser demasiado curiosa y preguntar, así que me quedo a medias, o yo qué. sé. De todas formas, tampoco es que tenga la mejor de las tardes hoy, así que igual mañana me paso y entiendo mejor eso del "medio hombre" y una semana y tal.
    Besitos y un copazo de coñac, que seguro que te tiempla los nervios.

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    1. Bueno Jana, siento que no lo hayas entendido pero por desgracia tampoco puedo explicar mucho más.
      Mira! si te bebes tú ese copazo de coñac a lo mejor ya entiendes la entrada, reconozco que a veces hay que estar un poco "pasao" para entender mis cosas

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  3. A mi lo de las cajas me ha quedado claro.. jajajajajaja!!!.. no me vale pá ná porque no tengo hijos pero oye.. el saber no ocupa lugar ...
    eso sí, entre estas entradas y la super-nany estoy más que puesta en el tema!!!..
    Del tema del príncipe azul me ha parecido entender que muy, muy contenta no te tiene.. y eso me da rabia.. ea!!!
    pero a lo mejor lo he entendido mal..

    Besos

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    1. Ay Lady...siento que sea todo monotemático con los niños pero es que ahora es lo que más me agobia....ya cambiaremos de tercio, no te preocupes.
      Y efectivamente al leer la entrada puede parecer que con mi pareja no me va bien pero nada más lejos de la realidad! Pero sí es verdad que esta relación es la más difícil que he tenido nunca porque no estamos solos y muchas veces discutes más por problemas generados por terceras personas que por ti o por tu pareja. Gracias por preocuparte por mi, Lady, pero por ahora vamos muy bien.

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    2. Me encantan las cosas de los niños.. y veo la super-nany porque me gusta mucho.. ;)
      Así que tú sigue contándome cosas de cajitas..

      Besos

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  4. Como dicen en un a peli que me gusta mucho...

    - ¡Aigor Cajones...! o era Coj..., vaya ahora no me acuerdo...

    ;)

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    1. jajajajajajajajajaja chisme, un comentario a la altura de la entrada, como siempre!

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  5. Pues es un lio de entrada en el blog pero chica, que la entiendo perfectamente, supongo que por la caótica mente de las madres (a juego con su caótica vida).
    Es un horror andar midiendo todo lo que haces porque el "moco" se pispa de todo y no le das buen ejemplo.
    Y luego el doble rasero de que si eres madre no puedes ser nada más y tu prioridad es el moco, pero si eres padre, puedes tener tus parcelitas que nadie te va a mirar mal.
    Cajas, todo en cajas y con un orden marcial, creo que esa es la solución a la caotica vida de madre, además trabajadora en mi caso, algún día lo conseguiré, ¡lo juro!.

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    1. No perdona Lulu, es una entrada perfecta donde se explica sin lugar a dudas el teorema de las cajitas, sois vosotros los que no entendéis bien (jejeje)
      "Marcial" esa es la palabra! yo siempre la confundo con "marciano"...aunque quizás en el fondo no es un error tan grande!

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Y si tú fueras Silvia, ¿qué me contestarías?